Debido a la pandemia de coronavirus COVID-19, la vida ha cambiado drásticamente en las últimas semanas. Pero, ¿cómo sería la vida después del coronavirus?.
La vida después del coronavirus en el trabajo
Cuando miramos quién puede trabajar desde sus casas para mantenerse a salvo y quién tiene que salir a la calle a buscar el sustento, nos damos cuenta que, si bien todos tenemos el desafío de mantenernos a salvo, algunas personas están en una mejor posición debido al tipo de trabajo que llevan.
Pareciera que ahora es más claro que nunca que las personas empleadas en lugares de trabajo con acuerdos sindicales tienen mejores protecciones.
Una de las consecuencias de esta crisis será un mayor reconocimiento de que necesitamos un sistema de salarios más justo, sobretodo si tienes que exponer tu salud saliendo de casa.
Del mismo modo, se espera que un cambio repentino en el valor que la sociedad le está otorgando al trabajo realizado por el personal de supermercados, farmacias y los conductores de entrega podría alterar la forma en que vemos los salarios.
¿Qué tan justo es el salario mínimo si las personas de las que dependemos para mantenernos a salvo casi no pueden cubrir todas sus necesidades?
Se hará imperativo que las manifestaciones de desigualdad cómo estas eventualmente conduzcan a algún tipo de cambio positivo.
La vida después del coronavirus en la oficina
Para la mayoría de las personas en trabajos profesionales, el distanciamiento social ha significado un cambio total y nuevo el trabajar desde casa.
Si las empresas puede mantener el mismo nivel de trabajo de esta nueva manera sin problemas: ¿podría el concepto de la oficina en casa haber llegado para quedarse?
Al menos en las áreas de gerencia, consultoría y proyectos se cree que es viable, tiene sentido que si los empleados pueden trabajar desde casa y aún mantener el mismo tipo de productividad esto pueda mantenerse de algún modo.
Las empresas podrían cambiar a espacios de oficina más pequeños y flexibles lo que supondría menos gastos de alquiler o mantenimiento de sus espacios de trabajo.
Las implicaciones de que los trabajadores de oficina ya no necesiten inundar las ciudades todos los días podrían ser enormes.
Las oficinas de las grandes ciudades se usarían menos y podrían ser más como oficinas emblemáticas, que los empleados pueden visitar algunas veces al año para eventos especiales o puntuales.
La vida después del coronavirus y la salud mental
En un período en el que nuestra seguridad, y la seguridad de nuestros seres queridos se ve amenazada, la ansiedad puede sentirse como la nueva norma.
Pero, ¿cuál será el impacto a largo plazo de vivir con intensa incertidumbre y aislamiento?
Ya existen personas muy afectadas en su salud mental por la pandemia de coronavirus
El temor es que el impacto en la salud mental y los efectos sociales más amplios del brote podrían conducir a más suicidios, se sabe que las presiones financieras conducen al aislamiento, a la automedicación y al suicidio.
Pasada la tormenta del coronavirus quedarán secuelas psicólogas profundas en algunas personas que hará que sea obligatorio que cada país implemente políticas de salud mental para tratar a la población.
La vida después del coronavirus en la economía
Algunos gobiernos se han comprometido a ayudar con los salarios de algunos trabajadores.
¿Cuál será el efecto indirecto de los cierres y despidos comerciales generalizados? ¿Qué sucede cuando más personas se ven obligadas a reclamar beneficios? ¿Nos dirigimos a una recesión?.
El coronavirus ya está causando recesión, la pregunta es si será corta o tomara más tiempo, esto depende de cuánto tiempo pase antes de que las cosas vuelvan a la normalidad.
Los economistas advierten que si muchas personas se ven obligadas a dejar el trabajo y entrar al sistema de asistencia social o los planes de ayuda que tengan los gobiernos, podría haber un enorme costo para la economía, lo que haría que se tome mucho más tiempo la recuperación económica de cada país.
La vida después del coronavirus: cambio climático
Un aspecto positivo de la pandemia de coronavirus es que se ha registrado una gran caída en la contaminación del aire y los niveles de CO2 en las ciudades de todo el mundo, ya que los trabajadores se quedan en sus hogares y los niveles de transporte se reducen drásticamente.
Nueva York ha visto una caída de casi el 50% de las emisiones de carbono emitidas por los automóviles, en comparación con esta época del año pasado, mientras que ha habido una caída estimada del 25% en el uso de energía y las emisiones en China.
Sin embargo, si bien estos cambios actuales son muy positivos para el ambiente, esto cambiará una vez finalizada la pandemia.
El escenario de como seria la vida después del coronavirus ya no es una incógnita, la vida del ser humano ha cambiado por la pandemia y siempre será un referente para futuras generaciones.
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