Washington, D.C., 17 de octubre de 2025 – En un golpe significativo a las redes de influencia del régimen venezolano, Hugo Armando Carvajal, conocido como “El Pollo” y exjefe de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) bajo Hugo Chávez y Nicolás Maduro, ha confesado ante la justicia estadounidense que el chavismo utilizó fondos de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) para financiar ilegalmente a figuras prominentes de la izquierda en América Latina y Europa.
Entre los beneficiarios mencionados se encuentran el presidente colombiano Gustavo Petro, el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, la argentina Cristina Fernández de Kirchner, el boliviano Evo Morales y el partido español Podemos. Estas declaraciones, que emergen en el contexto de la extradición de Carvajal a Estados Unidos en 2023, subrayan el vasto alcance del “narcotráfico estatal” venezolano y su rol en la exportación de una agenda ideológica socialista.
Carvajal, quien fue extraditado desde España tras años de litigios legales, ha cooperado con las autoridades estadounidenses como parte de un acuerdo para reducir su sentencia por cargos relacionados con narcotráfico y lavado de dinero. Fuentes cercanas al caso, citadas en reportes de medios especializados como Derecha Diario y The Objective, indican que sus testimonios incluyen detalles sobre transferencias millonarias disfrazadas como donaciones o inversiones, provenientes no solo de ingresos petroleros sino también de actividades ilícitas asociadas al Cartel de los Soles, una red de altos funcionarios militares venezolanos implicados en el tráfico de drogas.
Esta confesión, revelada hoy, confirma sospechas de larga data sobre cómo el chavismo ha utilizado el petróleo y el narcotráfico como herramientas geopolíticas para sostener aliados ideológicos en la región.
Precedentes: De la Detención en España a la Cooperación con EE.UU.
La trayectoria de Carvajal como informante clave no es nueva. En 2019, tras desertar del régimen de Maduro, fue arrestado en España a petición de Estados Unidos, que lo acusaba de conspirar para traficar cocaína hacia territorio norteamericano. Durante su estancia en prisión española, Carvajal ya había proporcionado información valiosa a la Audiencia Nacional de España sobre financiamientos chavistas. En octubre de 2021, por ejemplo, declaró ante un juez español que el gobierno venezolano había enviado maletas con millones de dólares a Néstor y Cristina Kirchner en Argentina, totalizando al menos 21 millones de dólares entre 2005 y 2007. Similarmente, reveló pagos a Gustavo Petro durante su campaña presidencial en Colombia, estimados en varios millones, canalizados a través de intermediarios.
Estos antecedentes se remontan a la era de Hugo Chávez, quien, según Carvajal, ideó un plan estratégico para expandir el “bolivarianismo” más allá de Venezuela. PDVSA, la entonces joya de la corona económica venezolana y completamente quebrada y casi infuncional, fue instrumentalizada como un fondo negro para estos propósitos. Reportes de The City Paper Bogotá en 2021 ya destacaban acusaciones similares contra Petro, basadas en declaraciones de Carvajal, quien afirmó que Maduro había “bancado” la campaña del ahora presidente colombiano. En Brasil, las conexiones con Lula y el Partido de los Trabajadores (PT) han sido investigadas en el marco de escándalos como Odebrecht, pero las revelaciones de Carvajal añaden un capa venezolana, vinculando fondos de PDVSA a campañas electorales.
Para Evo Morales, las confesiones apuntan a apoyo logístico y financiero durante su presidencia en Bolivia, incluyendo la evasión de sanciones y el blanqueo de dinero a través de empresas fantasma. En España, Podemos –fundado por Pablo Iglesias– habría recibido millones para impulsar su ascenso en 2014, disfrazados como consultorías o donaciones de fundaciones chavistas. Estos precedentes, documentados en entrevistas como la concedida por Carvajal al programa Domingo Espetacular de Brasil en 2021, pintan un panorama de una red sistemática de interferencia extranjera.
Publicaciones en redes sociales como X (anteriormente Twitter) han amplificado estas noticias hoy, con usuarios como @BowTiedMara y @devorahsasha compartiendo detalles de la confesión, destacando su impacto en la política regional. Analistas geopolíticos, como los citados en cuentas especializadas como @theinformant_x, ven esto como la confirmación de una “diplomacia del narcotráfico” que ha moldeado elecciones y políticas en múltiples países.
Impacto: Desestabilización Política y Económica en la Región
Las implicaciones de estas declaraciones son profundas y multifacéticas. En primer lugar, cuestionan la legitimidad de varios gobiernos y movimientos de izquierda en América Latina. En Colombia, donde Petro ha enfrentado acusaciones de corrupción desde su elección en 2022, esta confesión podría avivar investigaciones internas y presionar a la Fiscalía General. Expertos en Infobae y otros medios argentinos señalan que para Kirchner, ya envuelta en juicios por corrupción, esto refuerza narrativas sobre su dependencia de fondos extranjeros, potencialmente afectando al peronismo en futuras elecciones.
En Brasil, Lula, quien regresó al poder en 2023 tras su liberación de prisión, podría ver erosionada su imagen internacional, especialmente en foros como el BRICS, donde Venezuela busca aliados. Morales, exiliado en Argentina tras su derrocamiento en 2019, enfrenta renovadas acusaciones que podrían complicar su intento de retorno político en Bolivia. En España, Podemos, ahora parte de la coalición Sumar, podría sufrir un escrutinio mayor, recordando escándalos pasados sobre sus orígenes financiados por regímenes autoritarios.
Económicamente, el impacto se extiende al colapso de PDVSA, que pasó de producir 3 millones de barriles diarios en 2000 a menos de 800.000 en 2025, en gran parte debido a la corrupción y el desvío de fondos. Según estimaciones de la ONU y el Departamento de Estado de EE.UU., miles de millones de dólares fueron sifonados para estos fines, exacerbando la crisis humanitaria en Venezuela, donde más de 7 millones han emigrado desde 2014.
Políticamente, esto fortalece la narrativa de una “izquierda narcofinanciada”, como lo describen analistas en Derecha Diario, potencialmente impulsando un giro conservador en la región. Países como Argentina bajo Javier Milei y Ecuador han roto lazos con Maduro, citando precisamente estas redes de influencia.
El Nefasto Alcance del Chavismo: Dinero del Narcotráfico Financiando Operadores Políticos Globales
El núcleo de las revelaciones de Carvajal radica en el Cartel de los Soles, una organización criminal integrada por generales y almirantes venezolanos que controlan rutas de cocaína desde Colombia hacia EE.UU. y Europa. Nombrado por las insignias solares en los uniformes militares, este cartel ha sido designado por el Departamento de Justicia de EE.UU. como una amenaza narco-terrorista desde 2020, cuando se ofrecieron recompensas por Maduro y otros líderes.
Carvajal, quien fue sancionado por el Tesoro estadounidense en 2008 por asistir a las FARC en el tráfico de drogas, detalla cómo los ingresos del narcotráfico –estimados en decenas de miles de millones– se mezclaron con fondos de PDVSA para financiar operadores políticos. Esto incluye no solo campañas electorales sino también movimientos sociales, ONGs y medios de comunicación alineados con la izquierda radical. En posts en X, usuarios como @pott1s y @anonopshispano destacan cómo esta red ha permeado desde España hasta Bolivia, utilizando “dinero negro” para exportar ideología.
El alcance global es alarmante: reportes de inteligencia indican vínculos con Hezbollah en el Líbano y cárteles mexicanos, creando una red híbrida de crimen organizado y política. En Venezuela, esto ha financiado la represión interna, como se evidencia en decretos de austeridad de 2009 bajo Chávez, que ocultaban el desvío de fondos, según análisis compartidos en X por @KalebPrime. El resultado: un estado fallido que exporta inestabilidad, con impactos en migración, crimen transnacional y polarización política.
Importancia en el Contexto de la Guerra de EE.UU. contra el Cartel de los Soles
Estas declaraciones llegan en un momento crítico para la estrategia antidrogas de EE.UU. Bajo la administración actual, Washington ha intensificado su ofensiva contra el Cartel de los Soles, con indictments contra 15 altos funcionarios venezolanos en 2020 por “narco-terrorismo”. Carvajal, como testigo estrella, proporciona evidencia documental –incluyendo transferencias bancarias y correos– que podría llevar a nuevas sanciones y extradiciones.
En el contexto de la “guerra contra las drogas”, revitalizada tras el auge del fentanilo, estas revelaciones vinculan directamente el narcotráfico con interferencia electoral, elevando el caso a un nivel de seguridad nacional. Analistas en medios como Infobae argumentan que esto justifica una mayor presión sobre aliados de Maduro, como Brasil y Colombia, para aislar al régimen. Además, fortalece casos en la Corte Penal Internacional contra Maduro por crímenes de lesa humanidad.
Por su parte la Representante Republicana por Florida, María Elvira Salazar expresó en su cuenta de X – Twitter – que “El “Pollo” Carvajal lo confirmó: PDVSA financió a Petro, Lula, Kirchner, Evo y Podemos.
La izquierda del llamado “socialismo del siglo XXI” unida por la corrupción y el dinero sucio del chavismo.
Mientras el pueblo venezolano pasaba hambre, el régimen usaba el petróleo para comprar poder e influir en toda la región.
Lo he dicho siempre: el chavismo no es una ideología, es una red de corrupción internacional.”
En resumen, las confesiones de Carvajal no solo exponen las entrañas del chavismo sino que reconfiguran el mapa geopolítico de América Latina, recordando que el poder ideológico a menudo se sostiene sobre pilares ilícitos. A medida que se desarrolle el caso, el mundo observará si estas revelaciones traducen en justicia concreta o quedan como otro capítulo en la saga de impunidad regional.
Mientras tanto asistimos al reality show trumpiano de las narcolanchas en el Caribe y un narcorégimen intacto, pero burlado y vulnerable. La falta de acciones precisas despierta graves preocupaciones de que no “ocurra algo”, ese algo que todos en la región y en especial en Venezuela quieren que suceda.
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