Las drogas que alteran la percepción de la realidad y que en el pasado eran ilícitas, ahora se están considerando para una variedad de terapias,por ejemplo la medicina psicodélica puede tratar trastornos mentales.
Medicina psicodélica
Estas drogas “recreativas” fueron muy populares en los años 60 y luego fueron prohibidas por los departamentos de control de drogas, cerrando el camino a la investigación para su uso clínico.
Casi 40 años después se comienzan a hacer investigaciones serias sobre estas drogas y su uso en el campo de la medicina, y los resultados parecen ser muy alentadores.
En los primeros ensayos clínicos se encontró que estas drogas pueden ayudar a los pacientes con trastorno de estrés postraumático a confrontar los recuerdos que les causan el trauma.
En otros ensayos clínicos, el alucinógeno Ketamina pudo reducir los pensamientos suicidas y otros síntomas en pacientes con depresión clínica severa.
Usos y beneficios de estas drogas en el campo de la medicina
Se ha encontrado que las drogas psicodélicas tienen muchos beneficios en los trastornos psiquiátricos.
La Ketamina es un tipo de anestesia disociativa que está ayudando a pacientes con depresión clínica, y se ha observado que reduce significativamente los pensamientos suicidas.
La ketamina también ayuda a los pacientes que sufren del trastorno obsesivo compulsivo al reducir los impulsos compulsivos.
Por su parte, la droga alucinógena Psilocibina ayuda a los pacientes con depresión intratable ya que puede lograr que disminuyan los síntomas durante un año o más.
Terapia con drogas psicodélicas
El objetivo es comprender que tipo de droga sirve para cada tipo de trastorno, y de esta manera desarrollar tratamientos específicos para cada enfermedad.
Los científicos están estudiando los mecanismos cerebrales que se alteran en la mente con las diferentes drogas analizadas, esto representa el paso más importante para que puedan ser usadas en tratamientos convencionales.
Además, se están desarrollando mejores tratamientos que resulten seguros, con las propiedades de los alucinógenos pero evitando todos sus inconvenientes.
Así funcionan
Las terapias con medicina psicodélica funcionan de la siguiente manera:
El paciente se debe evaluar en varias sesiones para determinar cuándo, cómo y que tipo de droga usar para su tratamiento.
El terapeuta le administra la píldora y espera que esta actúe en el cerebro, luego inicia la terapia analizando lo experimentado en el proceso por el paciente y adaptándolo a su vida.
Los pacientes que sufren de estrés postraumático pueden reducir la angustia intensa y confrontar su trauma al tener un cambio radical de su perspectiva.
La medicina psicodélica podría sanar muchos trastornos de la salud, el debate se centrará en procurar hacerlas tan seguras que puedan evitar cualquier tipo de adicción.
De momento el panorama luce alentador.
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