Inicia investigación penal contra Guaidó
ETQQ / 14 Sept 2019.- Tarek William Saab anunció en rueda de prensa este viernes que se inicia investigación penal contra Guiadó por estar vinculado presuntamente con la banda paramilitar Los Rastrojos.
Saab se refirió a las fotografías en las que aparece Guaidó con Alberto Lobo Quintero, alias Brother, y John Jairo Durán, alias Menor, miembros del grupo irregular Los Rastrojos que según Saab, operan en la frontera colombo-venezolana.
“Son una banda criminal integrada por disidentes de las Autodefensas Unidas de Colombia, que se desmovilizó en 2006. Trabaja con organizaciones del narcotráfico y con el Cártel de Sinaloa”, señaló Saab.
Saab indicó que a ambos hombres los detuvieron en junio, luego de entregarse a las autoridades colombianas en medio de un enfrentamiento interno de la banda.
“Se les señalan por los delitos de narcotráfico, asesinato, extorsión, concierto para delinquir, uso de armas de guerra, entre otros”, agregó.
Saab hizo referencia a las palabras del senador Gustavo Petro, quien aseguró que Lobo Quintero y Durán tenían una casa dedicada a descuartizar personas en Puerto Santander.
“No se trata solo de unas fotos. Wilfredo Cañizares, defensor de Derechos Humanos en Colombia, informó que la entrada de Juan Guaidó a Cúcuta fue coordinada con miembros de Los Rastrojos”, dijo “el fiscal”.
Las fotos de Guaidó con los personajes de la mencionada banda han ocasionado un revuelo difícil de obviar.
Las fotos, según Saab, indican que el gobierno de Iván Duque delegó a Los Rastrojos para los arreglos correspondientes que permitieran el ingreso de Guaidó a Colombia.
“Las fotos de Guaidó con Los Rastrojos confirman la hipótesis de que él y su entorno mantienen relación con estos grupos criminales”, enfatizó Saab.
Lo que sí es seguro es que la caída libre indetenible que Guaidó ha venido experimentando en la aceptación general, necesita de una “empujón” de simpatía, y tal vez una victimización útil y conveniente, en la que la “investigación penal” de Tarek William Saab juega un rol justificativo.
La pérdida de credibilidad de Guaidó es debido a su propia pésima conducta, ausencia de concreciones y falta de coherencia de él y su entorno incluso vinculados a hechos de corrupción como el caso de la ayuda humanitaria en Cúcuta.
En Venezuela ya no es tiempo de borreguismos gratuitos ni fanatismos absurdos. La dirigencia política venezolana en todos sus colores es muy cuestionable y no podrá tapar el sol de su responsabilidad en esta desgracia nacional con un dedo.