Quinto episodio de House of the Dragon
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Quinto episodio de House of the Dragon

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Este domingo HBO nos presentó el quinto episodio de House of the Dragon llamado “We Light the Way”.

Este capítulo toma su nombre del lema de la casa Hightower y le da un cierre a la parte más “liviana” de la historia, adentrándonos hacia la futura sangrienta batalla por el trono de hierro.

 

El Quinto episodio de House of the Dragon

En un abrir y cerrar de ojos House of the Dragon ya se encuentra a mitad de camino, estos primeros cinco episodios nos mostraron la evolución e intenciones de todos los personajes de cara a lo más importante: la lucha por el trono de hierro.

La guerra por venir quedó cantada en todos y cada uno de los movimientos que hicieron los personajes en este episodio.

 

Daemon Targaryen saca del panorama a su esposa

 

El quinto episodio de House of the Dragon abre en El Valle, lugar donde vive la esposa de Daemon Targaryen, Lady Rhea Royce, heredera de Runestone.

Lady Rhea va cabalgando hacia su castillo y en el camino se le aparece Daemon, Rhea no pierde la oportunidad de reclamarle su ausencia y preguntarle si ya había regresado a consumar el matrimonio.

Un intimidante Daemon hace caso omiso a los reclamos y va directo al ataque, en un rápido movimiento logra que Rhea caiga de su caballo y este la aplaste quedando mal herida.

Daemon emprende su partida, pero su agonizante esposa le dice que termine lo que comenzó y Daemon no titubea en tomar una roca y acabar con su esposa y su matrimonio.

Ahora tenemos un príncipe Daemon viudo, soltero y listo para buscar todo lo que desea.

 

Viserys y Rhaenyra viajan para pactar la boda

 

La flota real se dirige a las Islas de Hierro, donde Viserys busca casar a la princesa Rhaenyra con el hijo de Corlys Velaryon y Rhaenys Targaryen, el joven Laenor Velaryon.

Viserys ya luce visiblemente enfermo y su deseo más inmediato es dejar a su hija casada con Laenor Velaryon.

Corlys acepta el arreglo pero su esposa Rhaenys expresa su preocupación por la verdadera naturaleza homosexual de su hijo Laenor.

También le advierte a su marido del peligro que representa el futuro trono de Rhaenyra, ya que por ser mujer será cuestionado en el momento en que el Rey muera.

Corlys hace caso omiso y dice que nadie se opondrá ya que el matrimonio unirá los dos ejércitos más poderosos de Poniente.

Por su parte los primos y futuros esposos, Rhaenyra y Laenor hablan en metáforas sobre el “gusto” y discuten los arreglos matrimoniales.

Los dos están consientes que sus preferencias sexuales no son afines, y una inteligente Rhaenyra logra hacer un pacto con su primo Laenor.

El matrimonio sólo será por las obligaciones con la corona, el pacto entre ambos incluye que los dos podrán seguir manteniendo sus libertades como crean convenientes.

La joven princesa tiene claro que quiere reinar, pero también quiere tener una vida amorosa satisfactoria, no como la vida de su mejor amiga Alicent Hightower.

Pero no contaba con que en el viaje de regreso a Kings Landing, su “amante” Sir Criston Cole le propusiera abandonar todo y casarse con el, a cambio de una vida libre y modesta.

Rhaenyra se burla, y le dice que no puede dejar la corona porque “ella es la corona”, y sin tapujos le sugiere seguir con ella como su amante.

Criston Cole queda devastado y con el ego herido por esta propuesta, esto representa un insulto para su nombre y para el afecto que le profesa y se marcha.

 

Alicent abre los ojos

 

Cuando la comitiva vuelve a la Fortaleza Roja, la reina Alicent Hightower ya se encuentra preocupada por el pedido de su padre Otto Hightower, antes de partir.

Otto la acusa de creer en la historia de Rhaenyra y le dice que tendrá que elegir un bando; el Rey se está muriendo y el reclamo del trono de Rhaenyra provocará una guerra.

Esta guerra podría poner en peligro al hijo de Alicent, el primogénito varón del Rey Viserys. Alicent duda y busca respuestas, y las obtiene de parte del hijo de la nueva mano del Rey y de Sir Criston Cole.

Cole en una muestra de dolor no duda en exponerle a Alicent su aventura con Rhaenyra esa noche.

El descubrimiento de saberse engañada por su mejor amiga, Rhaenyra, la cambia por completo.

 

Un compromiso, una muerte y una boda rápida

 

El banquete de bienvenida a los nuevos novios comienza con la llegada de los importantes invitados, pero sin la presencia de la Reina Alicent.

Las familias en Westeros se comprometen con un festín que incluye cena, baile y como todos sabemos: caos.

La llegada de la familia Velaryon abre la celebración, pero unos minutos más tarde hace su aparición el desterrado y ahora viudo, Daemon Targaryen.

Como es costumbre en él aparece sin que nadie lo llame, y hace una dramática entrada en solitario en medio del salón repleto de invitados.

Al Rey no le queda más remedio que pedirle una silla e invitarlo a formar parte de la fiesta.

El rey Viserys comienza su discurso, mismo que es interrumpido por la Reina Alicent, quien aparece ataviada de verde (el color de la casa Hightower) y que se considera un signo de guerra.

Alicent avanza hasta la gran mesa y se sienta a la derecha del Rey.

 

El baile

 

Rhaenyra y Laenor se acogen a la tradición e inaguran el baile, minutos más tarde los demás invitados se unen.

Daemon se levanta para bailar y coquetear con Laena Velaryon, pero su objetivo es llegar hasta donde está Rhaenyra.

Al mismo tiempo, el amante de Laenor se enfrenta a Cole, diciéndole que conoce el arreglo y que ambos deben proteger a sus parejas.

Un devastado Cole se comienza a llenar de ira por toda la situación que siente que lo degrada.

Daemon finalmente llega a Rhaenyra, el Rey Viserys no le quita la mirada, y le reclama acerca del compromiso, la princesa lo desafía a que se la lleve y la haga su esposa.

Sin importarle las miradas, Daemon comienza a tocar agresivamente a Rhaenyra, Cole se acerca para detenerlo, también lo hace el amante de Laenor, y los dos comienzan a pelear. Un Cole furioso y fuera de si golpea al novio de Laenor hasta causarle la muerte.

En medio del caos, Rhaenyra es rescatada por Sir Harwin Strong.

En un movimiento apresurado, el Rey casa a su hija con Laenor en una ceremonia privada, mientras Cole sale para suicidarse. Pero Alicent llega y se lo impide, después de todo se está procurando un aliado más en contra de Rhaenyra.

La escena finaliza con un Viserys que se derrumba en plenos votos matrimoniales.

Este capítulo marcó la despedida de las actrices que dieron vida a las jóvenes Rhaenyra (Milly Alcook) y Alicent Hightower (Emily Carey), el próximo episodio tendrán nuevas caras más maduras.

Todo quedó servido para la batalla a sangre y fuego que se librará por el trono de hierro.

Ver también:

Cuarto episodio de House of the Dragon

 


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