El brillo de los satélites de Starlink preocupa a los astrónomos, a pesar de los intentos de SpaceX aún no logran eliminar las interrupciones en los observatorios del mundo.
Brillo de los satélites de Starlink y el daño a la observación astronómica
Starlink es un proyecto de internet satelital de la empresa aeroespacial SpaceX, se basa en una megaconstelación de cientos de satélites lanzados al espacio.
Esta megaconstelación ha preocupado a los astrónomos al eclipsar y oscurecer a los objetos celestes.
Starlink, que tendrá miles de satélites en órbita transmitiendo Internet de alta velocidad a todo el planeta, tiene una desventaja para la observación de las estrellas.
Estos satélites reflejan luz solar por la noche para ser vistos claramente a simple vista.
Su brillo se ve acentuado por su posición que atraviesa los cielos como docenas de cuentas brillantes en una cuerda celestial.
Los satélites de Starlink desde 2019
Desde el primer lanzamiento de Starlink en mayo de 2019, se han puesto en órbita 655 satélites, y esto ha afectado a una serie de observaciones astronómicas.
La National Science Foundation (NSF) y la American Astronomical Society (AAS) publicaron un informe sobre esta situación.
El informe incluye las discusiones entre más de 250 expertos en el taller virtual Satellite Constellations 1 (SATCON1) a principios de este verano.
El informe proporciona recomendaciones tanto para los astrónomos como para los operadores de constelaciones de satélites a fin de minimizar las interrupciones observadas.
Por su parte la compañía SpaceX ha manifestado que no quiere estropear la astronomía, y busca hacer sus satélites menos intrusivos.
Los astrónomos temen no poder estudiar la naturaleza de la materia oscura y la energía oscura, identificar fenómenos astrofísicos transitorios y cartografiar los asteroides que amenazan la Tierra.
SpaceX se esfuerza por bajar el brillo de sus satélites Starlink
Los esfuerzos de SpaceX para bajar el impacto de sus satélites incluyeron el lanzamiento de un satélite prototipo llamado DarkSat a principios de este año.
El DarkSat cuenta con un revestimiento antirreflectante negro. Las recientes observaciones terrestres de DarkSat en órbita mostraron que lucian la mitad de brillantes que un satélite estándar de Starlink.
Esto representa una gran mejora, según los expertos, pero aún se encuentra muy alejado de lo que esperan los astrónomos.
“No consideraría DarkSat como una victoria, sino como un buen paso en la dirección correcta”, dice Jeremy Tregloan-Reed, astrónomo de la Universidad de Antofagasta en Chile y miembro del equipo de observación que evaluó el prototipo.
El equipo descubrió que aunque el revestimiento antirreflectante de DarkSat lo hacía invisible a simple vista, sigue teniendo demasiado brillo para evitar interferir con el Observatorio y sus telescopios principales.
La comunidad astronóma teme que a medida que las constelaciones de satélites se vuelvan más comunes, las empresas futuras puedan lanzarlas sin comprometerse con los astrónomos.
SpaceX desarrolla otras formas de reducir aún más el brillo de sus satélites. El segundo intento fue con un VisorSat, que utiliza una sombrilla negra para reducir el reflejo de la luz.
Los astrónomos se encuentran observando VisorSat para compararlo con DarkSat y aún no están seguros de si los métodos de oscurecimiento son la solución.
El próximo taller que reúne a astrónomos y operadores de constelaciones de satélites, está previsto para principios o mediados de 2021.
En el se hablará acerca de las políticas y las regulaciones necesarias para mantener lo más inalterable posible el rango de visibilidad para los astrónomos.
SpaceX espera eventualmente poner 12,000 satélites Starlink en el cielo, y el año pasado solicitó permiso para sumar 30.000 más.
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