La farmacéutica Pfizer inicia pruebas para la píldora contra el COVID-19, con el objetivo de poder ayudar a las personas a protegerse contra la enfermedad.
La píldora podría tomarse en los primeros síntomas de la infección por COVID-19 para evitar que el virus se replique en el cuerpo y pueda causar una enfermedad grave.
Pfizer dijo que está analizando la eficacia de la píldora cuando se usa en combinación con una dosis baja del medicamento contra el VIH ritonavir.
Las pruebas se realizarán entre personas mayores de 18 años que estén conviviendo con alguien que haya sido diagnosticado con COVID-19.
Pfizer planea inscribir a 2.660 personas en la última etapa de las pruebas de la píldora.
Los participantes del ensayo recibirán el tratamiento o un placebo por vía oral dos veces al día durante cinco a 10 días.
Estos ensayos clínicos comenzaron en marzo en la etapa temprana de la nueva terapia antiviral para el coronavirus, con el objetivo de implementarla para finales de 2021.
Como parte de un grupo de medicamentos llamados inhibidores de la proteasa, que se usan para tratar el VIH y la hepatitis C, este medicamento obstaculiza la producción de las enzimas necesarias para que el virus se replique en las células humanas.
“Esta píldora es una terapia antiviral oral que podría recetarse al primer signo de infección, sin requerir que los pacientes estén hospitalizados o en cuidados intensivos”, declaró Dr. Mikael Dolsten, director científico de Pfizer.
Los investigadores esperan que el uso de ritonavir en combinación con un medicamento antirvírico oral retrase la degradación del tratamiento potencial para que permanezca activo por más tiempo y ayude a combatir el virus.
“Si tiene éxito, creemos que esta terapia podría ayudar a detener el virus temprano, antes de que haya tenido la oportunidad de replicarse ampliamente”, dijo Dolsten.
Pfizer también está estudiando su posible tratamiento en personas que ya están infectadas con COVID-19, y esperan ver resultados antes de fin de año.
Esta píldora se administra a las personas expuestas a la infección en un intento por detener la progresión de la enfermedad a grave; es el primer antiviral oral diseñado específicamente para el Covid-19.
Aunque ya varias empresas farmacéuticas están trabajando en los llamados antivirales orales, que imitarían lo que hace el Tamiflu para la influenza y evitarían que la enfermedad se agrave.
“Creemos que combatir el virus requerirá tratamientos efectivos para las personas que contraen o han estado expuestas al virus, complementando el impacto que han tenido las vacunas”, dijo Mikael Dolsten.
Pfizer comenzó a desarrollar este medicamento, llamado PF-07321332, en marzo de 2020 y lo está probando en combinación con ritonavir.
El objetivo de las pruebas es evaluar la eficacia de los fármacos que se están estudiando para prevenir el Covid-19 y la enfermedad sintomática para el día 14.
Este medicamento incluso podría prevenir los síntomas y limitar la transmisión a las personas en el hogar de un paciente.
Hay al menos tres antivirales contra COVID-19 que se están probando en ensayos clínicos, uno de ellos el medicamento de Merck.
Tanto Pfizer como Merck están trabajando en la llamada “píldora COVID”, y si funcionan podría haber un medicamento disponible que podríamos tomar cuando tengamos COVID-19.
Merck anunció el 1 de septiembre que su píldora COVID pasará a un ensayo clínico de fase 3.
El medicamento, conocido como molnupiravir, es un “tratamiento antiviral oral en investigación” diseñado para evitar que las personas se infecten con COVID-19.
El molnupiravir inhibe la replicación viral, es decir, evita que el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, se reproduzca en el cuerpo y lo enferme.
Sería importante tener a la disposición una pastilla anti COVID, ya que actualmente no existe un medicamento para tratar las infecciones por coronavirus en personas que no están en riesgo de sufrir complicaciones graves.
El objetivo es hacer un antiviral oral para COVID que sea similar al Tamiflu y reducir los síntomas, reducir las complicaciones y reducir el contagio, dicen los expertos.
En la búsqueda del tratamiento ideal para combatir el COVID-19 se están usando anticuerpos monoclonales, pero son mucho más complicados y extremadamente costosos.
Estos anticuerpos monoclonales deben administrarse por vía intravenosa o mediante una serie de inoculaciones debajo de la piel, una píldora se podría tomar en casa.
Hasta ahora Pfizer no ha dado un cronograma oficial para ofrecer los resultados de los ensayos clínicos de su píldora contra el COVID-19.
Merck dice que la compañía espera datos de su prueba a finales de este año.
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